- Registro y Pedimento
- Coche europeo
- Duplicado de llaves
Pocas generaciones del 911 despiertan tanta emoción como el 993. Fue el último de los Porsche enfriados por aire, el que cerró con maestría una época en la que la conducción era pura, mecánica y profundamente emocional. Este ejemplar, proveniente de Holanda, conserva esa esencia con una personalidad única. Lleva la defensa y los rines del Turbo, calipers rojos y las rejillas del alerón pintadas al estilo del Carrera S, detalles que realzan su carácter sin romper su equilibrio original.
El motor respira mejor gracias a los headers, mientras los coilovers afinan su comportamiento para ofrecer una experiencia de manejo más precisa y conectada. En el interior, los diales en aluminio y el estéreo de un 996 aportan un toque contemporáneo que se integra de forma natural con el ambiente clásico del 993.
Es un auto para quien entiende lo que significa conducir un 911 auténtico, sin artificios ni filtros, una pieza que combina herencia, emoción y carácter en una sola silueta.